De gloria del béisbol a burla de la farándula: Luis Polonia

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Luis Polonia, conocido durante décadas como El Rey del Hit, símbolo del béisbol dominicano y orgullo de Pueblo Nuevo, Santiago, ha pasado de ser una figura admirada en los estadios a convertirse en el centro de burlas y controversias en las redes sociales.

Su reciente participación en el reality “La Casa de Alofoke 2” o como yo le digo “La Foke House” ha marcado un antes y un después en su imagen pública, borrando gran parte del respeto ganado a lo largo de más de 40 años de carrera profesional.

El hombre que fue ovacionado en los estadios del Caribe y Estados Unidos, que defendió con pasión la camiseta dominicana en los clásicos invernales, hoy se ve envuelto en un torbellino de memes, parodias y críticas que lo han transformado en material de entretenimiento más que en referente deportivo.

“El Rey del Hit” se hunde en su propia historia

Justo cuando se estrenaba el documental “El Rey del Hit: Luis Polonia”, dirigido por Eddy Jiménez y producido por Joseph Hamilton —una pieza que prometía rescatar la historia de superación del legendario beisbolista desde sus humildes raíces en Santiago hasta su consagración en las Grandes Ligas—, el propio protagonista parecía dinamitar su legado.

La película, que buscaba inspirar a nuevas generaciones, no logró el impacto esperado, su lanzamiento coincidió con el ingreso de Polonia a La Foke House, donde su comportamiento y declaraciones han acaparado titulares por las razones equivocadas.

En lugar de una reivindicación, el documental quedó opacado por la polémica, mientras las redes lo convirtieron en un personaje más del espectáculo de Santiago Matías.

En el reality, Polonia ha pasado de ser respetado mentor deportivo a figura de burla, sus intervenciones, lejos de inspirar, han sido objeto de parodias tanto dentro como fuera de la casa, incluso algunos han manifestado su incomodidad ante la exposición del ex pelotero, señalando que “no todo lo que se hace por rating vale la pena”.

Los seguidores del programa aseguran que su participación ha sido un “error monumental”, convirtiendo a la leyenda del béisbol en una caricatura de sí mismo. Memes, videos y montajes satíricos han inundado las redes, haciendo de su figura un fenómeno viral que, más que admiración, despierta compasión y desconcierto.

Pero el golpe más fuerte a su reputación vino de su propia boca, durante una conversación dentro del reality, Polonia reveló cómo inició su relación con su actual esposa, Jennifer, a quien conoció cuando “le faltaban dos meses para cumplir 18 años”. Aún más grave, admitió haber ofrecido mil pesos a una mesera para conseguir su contacto.

Estas declaraciones encendieron las alarmas en los colectivos de mujeres y feministas, que cuestionan el tono y la naturalidad con que el exjugador relató una relación que hoy sería considerada una posible transgresión de la ley.

El artículo de Clotilde Parra en Diario Libre, titulado “Debilidad por las menorcitas”, criticó duramente no solo a Polonia, sino a una cultura que normaliza la depredación sexual como “medalla de virilidad”.

A esto se sumó un artículo del veterano periodista Bienvenido Rojas, en el 2023 también en Diario Libre, recordando el caso de violación por el que Polonia fue arrestado en 1989 en Estados Unidos, por el cual pagó una fianza de 5,000 dólares. Su pasado judicial, que muchos jóvenes desconocían, volvió a ocupar portadas, poniendo en entredicho la figura de quien alguna vez fue un ídolo nacional.

¿Actuará el Ministerio Público?

Las confesiones públicas de Polonia han despertado interrogantes legales y éticas, en las redes, abogados, periodistas y usuarios comunes han cuestionado si el Ministerio Público actuará de oficio ante sus declaraciones, tal como lo hizo con el también pelotero Wander Franco, investigado por un caso similar.

Hasta el momento, las autoridades no han emitido un pronunciamiento formal, pero el tema se ha instalado en la conversación pública, especialmente en programas de opinión y farándula, donde se debate si las figuras públicas deben rendir cuentas no solo por sus actos, sino por la influencia que ejercen en una sociedad cada vez más expuesta a los discursos normalizadores del abuso.

Dentro de La Foke House, Polonia prometió que si ganaba el premio lo destinaría a su academia de béisbol, para apoyar a jóvenes talentos, sin embargo, sus propios compañeros y seguidores cuestionan esa afirmación, señalando que la academia ha estado abandonada y sin mantenimiento durante años.

Incluso figuras del entorno deportivo, han deslizado dudas sobre el origen del terreno donde funciona la academia, insinuando que “muchos saben cómo se obtuvo ese play”.

Para colmo, en emisiones posteriores del reality, el exjugador cambió su discurso y dijo que, si ganaba, entregaría el premio a su esposa Jennifer, aumentando las críticas y la percepción de incoherencia.

El final de una leyenda en crisis

De la gloria en el diamante a la humillación mediática, Luis Polonia vive el capítulo más amargo de su vida pública, lo que comenzó como una oportunidad para acercarse a nuevas generaciones y limpiar su imagen terminó exponiendo sus sombras más profundas.

Hoy, el Rey del Hit se enfrenta al juicio implacable de las redes, los medios y su propia historia. En vez de aplausos, recibe risas; en lugar de respeto, incredulidad. Y aunque su nombre seguirá inscrito en los récords del béisbol dominicano, su legado moral —ese que parecía intocable— ha quedado atrapado en la jaula de la farándula, donde la fama ya no se mide por hazañas, sino por escándalos.