Estados Unidos reconoce que la crisis de Haití constituye una amenaza para República Dominicana

Washington / Santo Domingo. — Autoridades del Gobierno de Estados Unidos admitieron recientemente que la profunda crisis de seguridad, política y social que atraviesa Haití representa una amenaza directa para la República Dominicana, debido al deterioro institucional y al avance de grupos armados que mantienen el control de amplios territorios del país vecino.

El reconocimiento fue revelado en un documento diplomático que circuló este miércoles, en el que se afirma que la “inestabilidad en Haití representa una amenaza para la seguridad de la República Dominicana y también para los Estados Unidos”.

La declaración subraya la preocupación de Washington ante el creciente impacto regional que ha generado el colapso del orden público en Haití.Según la comunicación oficial, la administración estadounidense trabajará de manera coordinada con el Gobierno dominicano y con actores del sector privado para “mitigar la amenaza” y contribuir a los esfuerzos internacionales orientados a estabilizar el país haitiano.

Respuesta dominicanaEl Gobierno del presidente Luis Abinader ha advertido reiteradamente que la situación en Haití podría tener consecuencias inmediatas para la seguridad nacional dominicana.

En los últimos meses, las autoridades han reforzado los controles fronterizos, incrementado el despliegue militar y promovido acciones diplomáticas para que la comunidad internacional asuma un rol más activo en la recuperación del vecino país.

República Dominicana también ha expresado su respaldo a la transformación y fortalecimiento de la misión de seguridad desplegada en Haití, al considerar que solo una intervención con mayores recursos y liderazgo claro podría frenar la expansión de las pandillas y restaurar el orden institucional.

Preocupación regionalExpertos en seguridad consideran que la desestabilización haitiana no solo implica riesgos humanitarios, sino también amenazas transnacionales, entre ellas tráfico de armas, migración irregular, contrabando y expansión de estructuras criminales hacia países cercanos.

Estados Unidos, en línea con estas evaluaciones, reiteró su compromiso de apoyar misiones de paz y cooperar con los gobiernos de la región para evitar que la violencia y la crisis humanitaria se desborden más allá de la frontera haitiana.

Reacciones internasAnalistas y sectores políticos en República Dominicana aseguran que este reconocimiento por parte de Estados Unidos confirma las advertencias que el país ha sostenido durante años: que la crisis de Haití debe ser tratada como una prioridad hemisférica y no solo como un asunto bilateral